La barraca olesana de piedra seca

Referente identitario y valor histórico son las palabras que definen la barraca olesana de piedra seca. Exclusiva y particular en su tipología, forma parte del patrimonio material y rural del municipio. Se trata de una construcción característica del término municipal de Olesa que combina los muros de piedra seca laterales con un envigado a dos vertientes hechos con troncos de olivo, el árbol predominante en nuestro paisaje agrícola, con una cubierta de losas planas, tierra y, a menudo, con vegetación que afianza la tierra. Los troncos son del olivo Palomar, variedad autóctona de Olesa, ideales para hacer de vigas por la dureza y resistencia de su madera.

Aunque algunas han ido desapareciendo (principalmente, por incendios forestales o por falta de mantenimiento), todavía se pueden encontrar enteras una treintena de estas barracas endémicas, principalmente en el llano agrícola de Can Llimona. Se estima, sin embargo, que hay alrededor de unas 200 más que están medio destruidas.

El origen de la tipología particular de la barraca olesana de piedra seca se debe seguramente a la facilidad de su construcción respecto a las clásicas construcciones en las que el techo es cúpula o falsa cúpula y requiere mucha más técnica. Esta exclusividad ha despertado el interés de varios estudiosos y doctores universitarios y ha sido objeto de varias publicaciones, artículos y exposiciones.